Hacer un sencillo analisis de suelo

Ante cualquier proyecto de permacultura que queramos diseñar nos resultará muy útil realizar un pequeño estudio del suelo sobre el que nos moveremos. Para conocer la naturaleza de nuestra tierra, contrastar qué árboles iran mejor en nuestro bosque comestible o qué minerales añadir al bocashi para nuestra futura huerta. Para conocer qué tipo de tierra es, su PH o el manejo que se le ha dado previamente no hace falta ser un químico experto. Tan solo un poco de tiempo y curiosidad.

En primer lugar tendremos que irnos hasta el campo, cavar unos agujeritos y sacar de ellos unas muestras de tierra. En este caso analizaremos la tierra para conocer sus propiedades de cara al diseño de un bosque comestible de secano. Si el interés radicase en conseguir material para bioconstrucción (adobe) las pruebas serían diferentes.

Tomamos muestras de tierra, procurando no tomar piedrecitas ni restos de materia orgánica, a unos veinte cemtímetros de profundidad. Las colocamos en cuatro tarritos de cristal.

A la hora de tomar estas muestras también podemos hacer un breve analisis de campo sobre el terreno. Por ejemplo, podemos llevar un viejo cuchillo de cocina grande y hundirlo en el suelo. Si la tierra ha sido labrada esta prueba nos indicará a que profundidad se encuentra la «suela de labor» o el inicio de la tierra compactada. Si el cuchillo penetra hasta el mango tendremos un misterio sin resolver: un suelo fértil sin compactación (eso si que requeriría una investigación). También podemos observar el color de la tierra, su granulometría al tacto e incluso su sabor.

  • Suelos blancos indican presencia de carbonatos, yesos o escasa materia orgánica.
  • Suelos rojos son indicadores de la presencia de hierro.
  • Suelos amarillos pueden contener aluminio y hierro.
  • Suelos grises denotan condiciones anaerobias (suelen darse bajo charcas o lagunas).
  • Suelos marron claro indican pobre presencia de materia orgánica.
  • Suelos marron oscuro indican buena presencia de materia orgánica.
  • Suelos negros denotan la presencia de minerales como manganeso o abundancia de materia orgánica (humus).
  • Suelos agrios suelen tener un PH ácido.
  • Suelos dulces suelen tener un PH alcalino.
  • Suelos ásperos al tacto tendrán naturaleza arenosa o franco-arenosa.
  • Suelos suaves tendrán naturaleza limosa.
  • Suelos ligeramente pegajosos tendrán naturaleza arcillosa.

En este caso el sabor del suelo era mucho más dulce en las muestras 1 y 2 que muestran tonalidades más arcillosas. Las muestras 3 y 4 eran más agrias. Por el color deducimos que la tierra prensenta hierro, al tacto que es arcillosa y en las muestras 3 y 4 hay más materia orgánica. Existe un sencillo método para comparar la cantidad de materia orgánica (y microbiología) del suelo. Para ello se toma una pequeña muestra y se le echa un chorrito de agua oxigenada, si burbujea con fuerza es que hay abundante materia orgánica. De lo contrario el suelo esta muy muerto.

Ahora vamo a analizar el PH y el tipo de suelo según su granulometría, o su cantidad en ARENAS, LIMOS y ARCILLAS. Para ello tamizamos y colocamos las muestras en tarros más altos. Los dejamos un día al Sol para que pierdan toda la humedad. Un análisis olfativo me indicó entonces que las muestras 1 y 3 tenían un olor como a encurtidos o a chucrut, la número 2 tenía un aroma más dulce, como de mermelada de albaricoque y la muestra 4 olía a pisto manchego. Aún no entiendo muy bien el por qué de esto.

Bueno… pues echamos agua (¡IMPORTANTE! ¡Agua de lluvia o destilada! para no alterar el PH) en cada uno de los tarros hasta casi llegar al borde. Luego ayudandonos de un palito los removemos muy bien uno por uno. Muy, pero que muy bien removidos. De este modo lograremos que todas las particulas de la tierra se suspendan en el agua. Luego se irán depositando poco a poco según su peso y tamaño. Así, una vez que la mezcla decante por completo observaremos:

  • Las piedrecitas o gravilla estan justo al fondo
  • Más arriba la capa de arena
  • Más arriba la capa de limo
  • Más arriba la capa de arcilla
  • Y finalmente veremos que la materia orgánica flota sobre la superficie del agua.

Para obtener el tanto por ciento en arena, limo y arcilla cogemos una pequeña regla y medimos. Primero medimos el total de la tierra (por ejemplo en la muestra cuatro son 78mm) y luego vamos midiendo cada una de las franjas (que para esta muestra son: 30mm de arcilla, 10mm de limo y 38mm de arena). La capa de limo normalmente es como una especie de mezcla entre la arena y la arcilla lo cual hace que en ocasiones no se distinga bien cuando comienza una cosa y termina la otra. Aquí lo dejaremos al buen ojo de cada cual, cuanto más tiempo repose la prueba (varios días) mejor.

Haciendo una sencilla regla de 3 obtendremos el porcentaje de cada cosa, luego podemos usar esta tabla para determinar el tipo de tierra. Trazamos una linea perpendicual al lado, en el punto del porcentaje de cada tipo de sedimento y buscamos el centro del triangulo que forman:

analisis de sedimentación de suelo

Como preveíamos los suelos de las muestras 3 y cutro tienen una naturaleza más franco/arenosa, la cual es la ideal para la mayoría de cultivos. Las zonas de las muestras 1 y 2 son más arcillosas y cabe destacar la extemada arcillosidad de la muestra 2, si algún día necesitasemos extraer barro para la bioconstrucción, éste sería el primer lugar a tener en cuenta (algo que apuntar en nuestro diseño).

Ya que nos ponemos podemos ser más concretos y calcular el PH del suelo. Para ello tenemos que ir a la tienda a comprar unas tiras medidoras de PH, las que encontré eran bastante caras y especiales para medir también el cloro en piscinas, pero estoy seguro que son las que más os encontrareis en el mercado. Rogemos por la vuelta a las droguerías del sencillo papel de tornasol.

Muy sencillo: cogemos una de las tiras, la sacamos de su envoltorio y (con la mezcla totalmente en reposo) la introducimos en el agua que cubre la tierra. La dejamos ahí un segundo, la sacamos y comparamos con la escala (que en este caso viene dada en el botecito que contiene las tiras medidoras) de PH.

Con todos estos datos ya tenemos mucho mejor analizado nuestro terrenete. Ahora podremos ser mucho más eficientes a la hora de ubicar los árboles y demás plantas que formarán este bosque comestible en relación al suelo más indicado para cada una.

Espero que os sirva esta info. que seais muy pero que muy felices y… ¡Vamos al lio!

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